Las comidas Light: son alimentos reducidos en
carbohidratos y grasas principalmente, que pueden cumplir dos funciones; la
principal es que permite el control de peso y mejora la nutrición; y otras de
las funciones es que adicionan un nuevo segmento a la industria de alimentos,
muy rentables para el mercado moderno (Astiasarán, 2000).
Historia
de la aparición de los Alimentos Light: Los alimentos light surgieron
en la década de los 80. En estos años comenzó a emplearse la sacarina como
edulcorante en lugar del azúcar en alimentos dirigidos a personas diabéticas o
que querían bajar de peso. Los primeros alimentos light fueron bebidas
refrescantes sin azúcar, que llevaban su propio nombre, este es el caso
de la bebida Tab, de la factoría de Coca-cola, que fue rápidamente sustituida
por la Coca cola diet, que luego pasó a llamarse Light (Carson,
1990).
Durante esta década la población comenzó a tomar conciencia de la relación entre salud y alimentación, sobre todo en lo relativo a la obesidad. En consecuencia, los alimentos light empezaron a tener un auge imparable. Se publicitaban y vendían como alimentos a los que se les habían eliminado nutrientes, cuyo aporte excesivo podía tener efectos perjudiciales para la salud de los consumidores. Toda una generación de nuevos alimentos cuyo contenido en grasas y azúcares había sido modificado comenzó a hacerse presente en el mercado. Hoy en día estos alimentos reciben diversas denominaciones: "light", "aligerados", "ligeros", "bajos en grasa", "bajos en azúcar", "sin azúcar" o "bajos en calorías" (Bruhn, 1992; Marine, 2006).
En los años noventa se llevaron a cabo importantes
estudios e investigaciones sobre diferentes aspectos relacionados con el diseño
y la elaboración de los alimentos Light (Pszczola, 1992). Es decir la industria
alimentaria tuvo que realizar un esfuerzo máximo para poder alcanzar el nivel
de desarrollo tecnológico y productivo que la situación de mercado requería.
Requisitos que deben cumplir los alimentos light o
ligeros: En
nuestro país no existen especificaciones legales respecto a las normas de
calidad que deben cumplir estos alimentos Light, tampoco existe un organismo
que se encargue de la supervisión del etiquetado de estos alimentos Light.
En la
actualidad la única referencia que tienen las empresas del sector alimentario
para calificar sus productos como Light es el acuerdo elaborado para la
Ordenación Alimentaria (CIOA) (Kuklinski, 2003).
Se trata
de una serie de recomendaciones, por lo que no existe un marco legal que
obligue por el momento a cumplir con los requisitos propuestos, como por
ejemplo, que la reducción del valor energético respecto al producto de
referencia sea al menos del 30%. Esto ha propiciado que no todas las empresas
cumplan con dicho acuerdo, por lo que se encuentran en el mercado productos
light o ligeros cuyo aporte energético apenas difiere de su equivalente de
referencia, pero con un precio notablemente superior (Kantor, 1990; Carson,
1990).
Según el acuerdo elaborado para la Ordenación Alimentaria (CIOA) y el Codex Alimentario, para calificar a un alimento como light debe cumplir los siguientes requisitos (Kuklinski, 2003)
- Los alimentos Light se caracterizan por su bajo contenido de sodio, o que contengan menos calorías que el alimento original (50% menos de grasa y de carbohidratos).
- Deben tener productos de referencia en el mercado.
- En el etiquetado debe constar que es un alimento Light o ligero y que el porcentaje de reducción de los ingredientes está disminuido.
- En el etiquetado debe constar el contenido calórico porcentual del producto ligero y del producto de referencia.
- No puede hacerse alguna referencia en el etiquetado a ninguna indicación para la salud que pueda llevar a error al consumidor, no puede haber indicación que atribuya al alimento una utilidad de adelgazamiento.
¿Que harían si supieran que en sus comidas diarias los
están envenenando?
¿Qué pasaría si alguien les dijera: "Ey, no toques esa
gelatina Royal porque tiene veneno"? O: "No toques ese Clight, o ese
yogur, o esa mermelada marca ".
O incluso más: ¿qué harían si les
dijera que la Coca Cola Light y la Coca Cola Zero tienen veneno? Probablemente
se sorprenderían. Y es posible que dijeran que no hay forma de que eso sea
posible. Y si dudan, me preguntarían cuáles son mis fuentes. Bueno, lo que
quiero decirles es exactamente eso: las Cocas de dieta, entre otros muchos
productos bajos en calorías, utilizan un endulzante que puede ser mortal para
el cerebro humano.
92 contraindicaciones. Un químico llamado Aspartamo. Y si miran la etiqueta de la Coca Cola Light que tienen al lado, van a poder leerlo. Aspartamo es uno de los ingredientes. ¿Por qué no sabemos qué es el Aspartamo? Porque la industria de los alimentos no le interesa que lo sepamos.
Principales productos que contienen aspartamo:
- Refrescos light (zero)
- Yogures
- Goma de mascar
- Salsas de cocina
- Edulcorante de mesa
- Bebidas en polvo
- Aguas saborizadas
- Productos sin azúcar
- Cereales
¿Pero qué contraindicaciones produce el Aspartamo?
¿Por qué es un veneno que puede ser letal?
¿Por qué no voy a tomar una Coca
Cola Light nunca más en mi vida?
Porque los mismos científicos que trabajaban
en el FDA (Foods and Drugs Administration; el organismo norteamericano
encargado de aprobar los nuevos productos químicos) se opusieron fervientemente
a la aprobación de este endulzante. Hicieron investigaciones en ratas con el
Aspartamo, y el Aspartamo les agujereaba el cerebro. Producía tumores cerebrales.
Traía una cantidad enorme de problemas neurálgicos.
"El Dr. Ralph Walton, Profesor y Presidente del Departamento de Psiquiatría, de la Northeastern Ohio Universities College of Medicine ha escrito acerca de los problemas conductuales y psiquiátricos activados por la disminución de serotonina causada por el aspartame: 'El Aspartame causa dolores de cabeza, pérdida de memoria, ataques cardíacos, perdida de visión, coma y cáncer. Empeora o imita los síntomas de tales enfermedades y condiciones como la fibromyalgia, MS, lupus, déficit de atención, diabétes, Alzheimer, fatiga crónica y depresión'. "
La pregunta es: ¿vale la pena, con tal de ingerir
menos calorías, consumir un producto que está científicamente comprobado que
puede dañar tu mecanismo cerebral? ¿Vale la pena, supuestamente en aras de
cuidar la salud, perjudicar nuestra propia salud superando límites peligrosos?
La respuesta es obvia. Y se hace más obvia cuando se piensa, además de en uno
mismo, también en la familia, y en todas esas personas que se están volviendo
adictas a los productos bajos en caloría
made in Aspartamo.